"La decimotercera edición de la Semana de Música Antigua de Logroño tuvo brillante colofón con este espléndido espectáculo musical en torno a la victoria de los tercios españoles en la famosa batalla de Pavía."
La decimotercera edición de la Semana de Música Antigua de Logroño tuvo brillante colofón con este espléndido espectáculo musical en torno a la victoria de los tercios españoles en la famosa batalla de Pavía. A Aarón Zapico, fundador y director del grupo Forma Antiqua, le gusta montar los conciertos no como una sucesión de números sueltos con más o menos afinidad, sino engarzando cada una de las obras en una original trama argumental, contando incluso con un actor describiendo los tremendos momentos que rodearon a una de las más famosas batallas de la historia de España.
'Resuene el orbe' es el título de un espectáculo muy bien planteado, ameno, interesante, con excelente calidad musical y hasta con algún movimiento escénico. En este planteamiento prima la unidad del discurso y la línea argumental sobre la individualidad de cada pieza interpretada, de forma que es imposible saber en cada momento qué obra estamos oyendo. El material musical era variadísimo, con una selección de gallardas, pavanas, tientos, chaconas, batallas y danzas de más de un siglo y de compositores como Cabezón, Scheid, Aguilera, Correa, Uccellini o Falconieri, todo ello mostrando una asombrosa unidad y homogeneidad.
De la calidad de esta formación ya dejé constancia en la crítica que hice en este diario hace cuatro años comentando otro precioso y original concierto en Sajazarra. Entonces resaltaba la sólida base que conforman los tres hermanos Zapico, Pablo inmejorable guitarra barroca, Daniel espléndido a la tiorba y Aarón sólido al clave y en la dirección musical. Miren Zeberio y Jorge Jiménez estuvieron a gran altura en los violines y el flautista Alejandro Villar demostró ser un excelente intérprete. Añadamos las buenas prestaciones de Ruth Verona al violón, de Lluis Coll con el corneto y de Daniel Garay con las diferentes percusiones, que completaban la plantilla de este singular y acreditado grupo de música antigua.
Los intensos aplausos finales fueron fiel reflejo de la satisfacción general del numeroso público asistente, que fielmente ha seguido una edición más de la Semana de Música Antigua, sin nombres espectaculares pero también sin altibajos y con un notable nivel artístico.